martes, 3 de abril de 2012

El uso del archivo fotográfico en la creación artística

De un tiempo aquí ando detrás de las razones que explican el porqué de la tan alta presencia del archivo fotográfico en la producción artística contemporánea. Ejemplo de dicha abundancia es la cantidad de exposiciones que durante los últimos meses se han podido y pueden visitar en la ciudad de Barcelona.

Iñaki Bonillas. Archivo J.R. Plaza
Hace menos de un año podíamos ver "Històries d'arxiu", la exposición del artista Pere Noguera en la Fundació Antoni Tàpies o "Estilo Indirecto", que pudimos ver en la Fundación Foto Colectania y que mostraba trabajos de diversos artistas en los cuales la imagen de archivo era su materia prima. A esta lista podemos añadir la exposición que mostraba el archivo fotográfico utilizado por el pintor Josep Maria Sert celebrada en Arts Santa Mònica y hace algo más de tiempo pudimos ver en La Virreina Centre de la Imatge, dentro de la muestra "Antifotoperiodismo", el proyecto sobre Kurdistan,  por la reconocida fotoreportera Susan Meiselas.

Pere Noguera. Històries d'arxiu
Actualmente podemos ver exposiciones de los trabajos del artista mexicano Iñaki Bonillas en La Virreina Centre de la Imatge, que hace uso del archivo fotográfico familiar de su abuelo J.R. Plaza, podemos ver también "Refotografiar Barcelona amb Mark Klett" en el Arxiu Fotogràfic de Barcelona (AFB), trabajos realizados a partir de imágenes de la ciudad que forman parte de los fondos de del AFB. A estas dos se le unen otras más, como "Noch Immer Storm (Still storming)", la exposición que corre a cargo de Peter Piller, un habitual en la reutilización de imágenes, que se puede ver en la Galería ProjecteSD o por último Catalunya Visió en Arts Santa Mònica, que rescata las imágenes publicadas en la revista que llevaba el mismo nombre entre los años 1968 y 1978.

Mark Klett. Panorama de Barcelona a lo largo de 438 años (fragmento)
Pero fuera de Barcelona también se han podido ver recientemente proyectos que hacen uso del archivo fotográfico, como "1944-1991", el proyecto sobre la ocupación soviética de Lituania, obra de Indré Serpytyte, presentado en una de las conferencias del último Festival Emergent Lleida o en Madrid, la exposición en el Museo Centro de Arte Reina Sofía de los archivos de Atlas Group, obra del artista Walid Raad o la gran muestra ATLAS ¿Cómo llevar el mundo a cuestas?.

Walid Raad. The Atlas Group
Indré Serpytyte 1944 - 1991
Y ésta es una pequeña muestra, hay muchas otras exposiciones, incluso si te acercas a alguna librería surtida puedes encontrarte libros como "Mars", obra de Thomas Ruff, una serie de imágenes muy estéticas que toman como punto de partida los archivos fotográficos de la NASA o a través de la red puedes ver libros como Astronomical de Mishka Henner que también reutiliza imágenes de la agencia espacial norteamericana.

Thomas Ruff. Mars
Mishka Henner. Astronomical
Mishka Henner. Astronomical
En definitiva, no es cuestión de hacer una lista exhaustiva en esta entrada, para ello hay publicaciones completas como el libro "Arte y archivo. 1920-2010. Genealogías, tipologías y discontinuidades" de Anna Maria Guasch, en el que se repasan un gran número de prácticas reutilizadoras de imágenes de archivo.




Ante todo este aluvión de proyectos basados en archivos fotográfcos, uno se plantea el porqué de ello sin dejar de lado el mensaje que de un tiempo para aquí nos llega de algunos "popes" de la fotografía, como son Joan Fontcuberta o Clément Chéroux, que nos invitan a reutilizar las imágenes existentes dado que ya no hay posibilidad de crear nuevas imágenes, un resumen de esta idea se materializó en la gran exposición "From Here On", celebrada durante los pasados "Rencontres de la photographie d'Arles". Un ejemplo de entre el gran número de proyectos expuestos fue el realizado por Pavel Maria Smejkal, que reutilizaba imágenes icono de la historia de la fotografía como puede ser la famosa fotografía del miliciano muerto de Robert Capa.
Pavel Maria Smejkal. Muerte de un miliciano.
La primera idea que nos llega a la cabeza ante tal reutilización de imágenes de archivo es la nostalgia y puede ser una de las razones. El viajar al pasado por aquello de que "cualquier tiempo pasado fue mejor" puede ser un buen motivo dada la crisis actual que nos deja "sin posibilidad de pensar en el futuro". Ya nada es previsible, todo es cambiante; la precariaedad laboral, las relaciones personales menos estables, la cultura del miedo, la lógica del mercado y el hedonismo del consumo, la obsolescencia programada, el fracaso de las utopías de masas son aspectos que nos han agotado las posibilidades de imaginar un futuro.

Por ello nuestra mirada se vuelve a atrás y rescata estas imágenes de archivo, que reutilizadas son un punto de partida para imaginar un futuro, reconstruyendo una nueva historia. En este sentido juegan series como Nijverdal/Hellendoorn de Peter Piller, una selección de imágenes a partir de un archivo anónimo de más de 15.000 negativos, algunos de ellos nunca positivados. Ahora ven la luz en una edición del autor que se apropia del archivo.

Peter Piller. Páginas del libro Nijverdal/Hellendoorn
Esta es la idea que desarrolló y en la que se fundamentaba la muestra "Estilo Indirecto", comisariada por Martí Perán. Estilo indirecto hace alusión a la forma en que se enfrenta el narrador a esas imágenes de archivo, si lo hace bien narrando aquello tal y como sucedió desde el tiempo pasado (estilo directo) o si bien el narrador se adueña de la voz de los personajes, selecciona la información que aportan y reconstruye los hechos de manera subordinada a la posición del propio narrador, a su tiempo, con lo cual las imágenes son ahora dialécticas, en el sentido determinado por Walter Benjamin.
David Maljkovic. Lost Memories from These Days.
De todas formas siendo ésta una opción válida a la hora de explicar la pulsión en el uso del archivo fotográfico en la creación actual, hay otros factores a tener en cuenta, aunque dejaré para el final la que en mi opinión es la razón que ahora mismo más me convence.

Como desarrollé en una entrada anterior en este blog, en febrero, dedicada a los modos de refotografiar, es obvio que emparejar imágenes de tiempos distintos, una realizada por nosotros y otra proveniente de otro archivo, pone de manifiesto por comparación el paso del tiempo y con él los efectos sobre las personas y las cosas. Es por tanto una buena forma de representar el paso del tiempo y la transformación del paisaje entre otros temas.

Ansel Adams /Refotografía de Mark Klett y Byron Wolfe, 2002
Y esta práctica cobra sentido en la medida que existen más localizaciones fotografiadas. Y las refotografías actuales serán fotografías de archivo utilizadas en futuras refotografías y ésta práctica nos permitirá describir los cambios a lo largo del tiempo de un paisaje determinado.

Y aunque ésta última puede ser una razón que explique parcialmente el fenómeno de utilización archivística masiva, podríamos añadir otras razones como puede ser una traslación de lo privado a lo público, a la recuperación de unas imágenes que en otra época formaban parte del archivo familiar, que tan sólo era mostrado a la familia y a aquellos amigos más cercanos. Por alguna razón hemos llegado a una situación en la que la separación entre lo público y lo privado se ha reducido al mínimo, tan sólo hemos de ver cómo la imagen de nuestra vida privada invade la red, prueba de ello pueden ser la colección de "reflectogramas" recopilada por Joan Fontcuberta.

De entre muchos de estos trabajos que he podido ver destacaría el de Paco Gómez que recupera el archivo familiar de Los Modlin, una familia de artistas americanos afincados en Madrid desde los años 70 obsesionados con la fama pero que murieron con ese sueño incumplido de reconocimiento. A partir de estas fotografÌas encontradas, Paco Gómez reconstruye sus vidas de forma obsesiva, buscando su huella en los espacios que habitaron y penetrando en los misteriosos cuadros de Margaret Modlin, haciéndonos partícipes de esa narración.

Paco Gómez. Los Modlin
Paco Gómez. Los Modlin
Otro de esos casos en que archivos familiares traspasan al ámbito de lo público puede ser el de "Infinitamente serio", un libro de Lisbeth Salas que hace uso del archivo familiar del escritor Enrique Vila-Matas.

Lisbeth Salas. Infinítamente serio. (foto: Karla Olvera)
Lisbeth Salas. Infinítamente serio. (foto: Karla Olvera)
Pero sin duda, para mí, lo que explica todo este fenómeno es más sencillo y lo resume perfectamente una frase del mismo Pere Noguera que mencionaba al inicio de la entrada y es la siguiente "Nada muere completamente a la espera de ser leído para otro uso". Es decir, existe una combinación imagen-narrador-tiempo-lector y cualquier combinación puede dar resultados muy distintos, algo así como el efecto Kuleshov, siendo la imagen la misma los significados cambian en función de otros factores.

Y si fotografiar lo asimilamos a conseguir fragmentos de la realidad, éstos pueden provenir bien de nuestra realidad actual o de anteriores y en esta realidad anterior encontramos los archivos fotográficos, de manera que es un espacio más de donde extraer nuestras imágenes que utilizaremos para generar el discurso que queramos compartir.

En este sentido y como anécdota será interesante ver cómo evolucionan nuestras propias imágenes con el paso del tiempo, las imágenes que en su momento fueron meramente documentales ahora pueden ganar un carácter artístico, un ejemplo de ello puede ser lo que expliqué en otra entrada anterior. A veces, las imágenes de archivo tienen una estética que por sí sólas ya mejoran nuestra imagen resultante.

Jens Windolf. Nº 41
Estos han sido unos apuntes que os invito a ampliar pues seguro que habrán muchos motivos más pero sin duda a mí lo que más me aporta es esa facultad de la imagen para ser releída de mil maneras.


sábado, 4 de febrero de 2012

Modos de refotografiar

El miércoles pasado se inauguró la exposición "Refotografiar Barcelona amb Mark Klett", que muestra un encargo del Arxiu Fotogràfic de Barcelona (AFB) al fotógrafo norteamericano para realizar unas panorámicas de la ciudad desde Miramar, además de este encargo se muestran las refotografías realizadas por el grupo de alumnos del taller que realizó en 2010 en Barcelona y todo ello juntamente con las imágenes del fondo del AFB utilizadas para dichas refotografías. Yo diría que se trata de la primera exposición monográfica dedicada a este género fotográfico en nuestro país y entre algunas personas que asistieron había cierto desconocimiento del género, por ello escribo estas líneas explicando un poco qué es la refotografía y de qué manera se nos muestra.

Mark Klett. Panorama de Barcelona a lo largo de 438 años (fragmento)
La refotografía la podemos calificar, de una forma simple, como un género de la fotografía que consiste en repetir una toma prévia desde el mismo punto de vista ("vantage point" para los anglosajones) para captar los cambios producidos por el paso del tiempo. Y para ello básicamente tenemos dos modos de mostrar dichas nuevas tomas o refotografías, lo podemos hacer mediante la disposición en forma de díptico o bien con la superposición de imágenes. Ambos modos son válidos y cada uno tiene sus ventajas e inconvenientes.

El díptico tiene la ventaja de poder apreciar todos los detalles de ámbas tomas de manera muy clara. Entre los muchos trabajos que utilizan esta manera de mostrar los cambios en nuestro entorno, tenemos el de Christopher Rauschenberg documentando el París de Eugène Atget. La serie completa se puede ver en su libro "Paris Changing: Revisiting Eugene Atget's Paris".

Rue des Nonnaines-d’Hyères, 1900, Atget
Rue de Fourcy, 1998,  Christopher Rauschenber
Y del París de Eugène Atget podemos movernos al Nueva York de Berenice Abbott, dos autores unidos también por refotógrafos. En el caso de Nueva York es Douglas Levere el fotógrafo que lleva a cabo esta serie titulada "New York changing" y utiliza también el díptico original/refotografía.

Douglas Levere. New York changing
Otro de estos trabajos que utilizan el díptico pero con una intención distinta a la de apreciar los cambios en el "paisaje" es "Ausencias" de Gustavo Germano, una serie de refotografías que ilustra la desaparición forzada de personas durante la dictadura argentina, nos habla de la memoria de una sociedad, así podemos comprobar que la refotografía nos permite tratar temas diversos, no sólamente el paso del tiempo y las transformaciones en nuestro entorno.

Gustavo Germano. Ausencias
Otro trabajo que se ha hecho muy famoso es "Back to the future", sobretodo por su difusión en las redes sociales es el de Irina Werning, éste también juega con la disposición en dípticos como los anteriores.

Irina Werning. Christoph 1990 & 2011 Berlin Wall 
Esta tipología de refotografía en forma de díptico puede incluso derivar a tríptico, es el caso de "Monumentos viajeros de Barcelona", un proyecto que comencé en 2010 y que documentaba el traslado de ciertos monumentos en Barcelona, en ese caso el tríptico era formado por una foto con el emplazamiento original del monumento, una segunda toma de ese mismo espacio sin el monumento pues había sido ya trasladado y una tercera toma del lugar donde actualmente se encuentra ese monumento. Era una forma de captar los cambios en el paisaje urbano y pensar acerca del porqué de esos traslados, en unos casos por razones urbanísticas, pero en otros casos por razones de orden político enmascaradas como urbanísticas.

Pedro Arroyo. Monumentos viajeros de Barcelona.
El segundo modo de mostrar refotografías del que os hablaba al principio es el de la superposición de imágenes y dentro de esta manera hay diferentes categorías. La superposición de imagen original sobre la imagen actual es una forma que nos remite a la idea de las capas de historia, no sólamente es un recurso formal sino que genera un mayor diálogo entre los dos momentos temporales.

Uno de los primeros autores, si no el primero, en utilizarlo fue Mark Klett. Este autor ha estado documentando los cambios que se han dado en el paisaje americano durante los últimos 25 años a partir de imágenes de los fotografos de las exploraciones americanas realizadas durante el siglo XIX, tales como Timothy O'Sullivan o Alvin Langdon Coburn. En ocasiones lo ha hecho con Byron Wolfe, es el caso de Second View.

Este modo de mostrar refotografías funciona muy bien cuando existen elementos que nos sirvan de referencia, es decir que sea fácilmente interpretable la superposición. Un ejemplo de ello sería la imagen "Lugar del salto peligroso, hoy en día demasiado grande" de Mark Klett & Byron Wolfe 2008, que podemos ver estos días expuesta en la Galería Tagomago de Barcelona en la exposición "Time Studies" de Mark Klett.

Mark Klett & Byron Wolfe. Lugar del salto peligroso, hoy en día demasiado grande.
Y está técnica de superposición se puede multiplicar añadiendo fragmentos de un original o incluso originales adicionales, es el caso de las refotografías del Gran Cañón realizadas por la pareja Klett-Wolfe, en estos casos el formato panorámico facilita la distribución de distintas fotografías originales.

Mark Klett and Byron Wolfe, 2008. Rock formations on the road to Lee's Ferry, AZ.
En la superposición de las fotografías también se puede jugar con la transparencia, de manera que la imagen original aparezca en la imagen actual destacando ciertos elementos de la primera toma, sería el caso de las refotografías de Serguey Larenkov que se centran en fotografías de la II Guerra Mundial.

Sergey Larenkov. June 6, 1944, D-day, Normandy. The landing of US troops on Omaha beach.
En ocasiones las transparencias en la superposición de imágenes proporcionan información que no sería tan fácil de ver con los dípticos, como es el caso de una serie que he dedicado al monumento del general Prim que se encuentra en el Parque de la Ciudadela y que deja de manifiesto una reubicación del monumento.

Pedro Arroyo. Recordando a Prim
Las imágenes vistas hasta ahora mostraban superposiciones realizadas mediante técnicas digitales pero existe otra opción y es refotografiar la fotografía original sujentándola con la mano, existen trabajos que utilizan la superposición manual y resuelven la unión de las fotografías en el momento de la toma, como es el caso del trabajo Altneuland de Amit Sha'a, premiado en el último World Press Photo o de "To lisbon with love" de Jorge Vilanova.

Amit Sha'al. Altneuland
Jorge Vilanova. To Lisbon with love
En la línea de sostener la imagen con la mano tenemos una variación que por primera vez he visto en el trabajo de uno de mis compañeros en "Refotografiar Barcelona amb Mark Klett", se trata de la serie realizada por John Frederick Anderson para esta exposición. Fred ha introducido un elemento nuevo para mostrar la imagen de archivo, un iPad. Éste permite mostrar la imagen original y a su vez el reflejo del espacio actual desde el punto de vista original. Cuando tiene la imagen mostrada en el iPad y reflejada en su pantalla, fotografía ambas, ya tenemos la refotografía por superposición con un grado de transparencia.

John Frederick Anderson. Rambla, 2011. AFB.
En alguna ocasión yo también he jugado con este elemento tecnológico, en mi caso un iphone, y es que a menudo la imagen original no la llevo en papel al lugar de la refotografía sino que con este dispositivo de bolsillo ya tengo suficiente referencia.

Pedro Arroyo. Desaparecida estatua ecuestre del General Franco.
Y si queremos dar un paso más, podemos dejar al espectador la búsqueda del "vantage point" o punto desde el cual el fotógrafo hizo la primera toma, es el caso de las intervenciones del colectivo "Arqueologia del punt de vista" que emplazan en la calle las imágenes de archivo y dejan que aquellos que pasan cerca de éstas intenten encajar la imagen original con el espacio objeto de la refotografía, en este caso además se potencia mucho más el diálogo entre las imágenes y el espacio. Es el caso de proyectos como "Repressió i resistència" o "Runa", en los que el observador debe hacer "arqueología del punto de vista" y averiguar donde se situó el fotógrafo para realizar la toma.
Arqueologia del punt de vista. Repressió i resistència.
Arqueologia del punt de vista.Runa
Aunque tampoco hemos de obsesionarnos con el encaje exacto de la imagen original con nuestra refotografía, en ocasiones no es posible, muchos puntos donde se situaban los fotógrafos anteriormente no son accesibles, es el caso por ejemplo de fotografías realizadas desde puntos en los que se encuentran en la actualidad vías de tránsito de coches o donde se ha construido algún edificio por entonces inexistente. Preparando una de las refotografías para la exposición "Refotografiar Barcelona amb Mark Klett" me topé con este problema. Quería recuperar el espacio de la plaza de Sant Sebastià, que se encontraba situada donde ahora podemos ver el monumento a Antonio López, para ello recurrí a dos imágenes de archivo con puntos de vista diferentes e imposibles de repetir por razones de tráfico, la solución fue hacer encajar las imágenes modificando la perspectiva de ámbas y el resultado nos aproxima a lo que debió ser la plaza de Sant Sebastià por entonces.
Pedro Arroyo. Plaça de Sant Sebastià
Y en esa línea estoy actualmente con un proyecto de refotografía utilizando Google Street View, es obvio que no interesa tanto el encaje de las imágenes como el discurso que se genera al insertar una imagen de archivo en una imagen capturada por el coche de Google.
Pedro Arroyo. Refotografiando Barcelona con Google Street View
Si por el contrario, lo vuestro es la precisión en el encaje de las imágenes podéis utilizar un software de refotografía computacional desarrollado por un grupo de tres investigadores del Massachussets Institute of Technology (MIT), parece ser que éste software fue utilizado por Sergey Larenkov.



Y si queréis más tecnología y os encontráis en Barcelona, podéis echar mano de BCN Visual, la aplicación para iPhone y Android que ha realizado el AFB. Dicha aplicación permite realizar refotografías ya que el smartphone detecta nuestra posición GPS y nos muestra en pantalla la fotografía de archivo que muestra el lugar donde nos encontramos en ese momento, ahora es cuestión de modificar la transparencia de la capa que corresponde a nuestra imagen de archivo y hacer la foto (en iPhone para conseguir el disparo hemos de apretar simultáneamente los botones home y de apagado). Si no queréis que aparezcan los botones del menú ni ningún indicador en pantalla con un sólo toque en la misma éstos desaparecen y la imagen nos queda limpia.

Pedro Arroyo. Imagen realizado con iPhone y BCN Visual
Ahora que ya tenéis unas cuantas opciones disponibles, os animo a que refotografiéis vuestro barrio, vuestra ciudad, vuestra historia familiar, es una buena forma de conocernos y re-conocernos, fotografiándonos y re-fotografiándonos, una práctica muy recomendable.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Los libros de Elisabeth Tonnard

A través de ABC Artists Book Coperative descubro a la artista Elisabeth Tonnard y unos cuantos de sus fantásticos libros. Ahora que está tan de moda la materialización de un proyecto fotográfico en forma de libro, lo que debe prevalecer en todo momento es el uso de todo el potencial que el soporte permite, no tan sólo utilizar el libro como un almacén de imágenes, sino que las imágenes jueguen con el papel, que el paso de las hojas dialogue con el contenido y esto es bien dificil, eso sin olvidar que tiene que haber un gran trabajo prévio de edición porque si no me parece que el diseño del libro y la narrativa se complicará bastante. Hay unos cuantos libros de Elisabeth Tonnard que cumplen perfectamente con este criterio, de entre ellos destacaría "Contemplation" y "Oceanus".  

Elis­a­beth Ton­nard @ Ams­ter­dam Art Book Fair 2011 © Mrs Deane.
"Contemplation" trata sobre el acto de mirar, pero también de mirar interiormente. En él aparecen sucesivos retratos de una única persona, que mira alrededor, nos mira y se mira. Es un libro silencioso en el sentido que no hay texto alguno que acompañe la serie de imágenes. 

Las ocho fotografías que aparecen en este libro provienen de un archivo familiar de los años 1940, fueron imprimidas en inyección de tinta sobre papel libre de ácidos y todo el conjunto fue cosido a mano. Se hicieron 16 copias y todas fueron vendidas, no me extraña porque se ve un objeto muy bonito.

Un último detalle es su portada, una placa además de llevar inscrito el título del libro, su superficie reflectante hace las veces de espejo para que nosotros mismos como lector nos podamos contemplar.

Elisabeth Tonnard. Contemplation
Elisabeth Tonnard. Contemplation
Elisabeth Tonnard. Contemplation
Elisabeth Tonnard. Contemplation
Elisabeth Tonnard. Contemplation
Elisabeth Tonnard. Contemplation
Otro de los libros que me han gustado de la extensa obra de Elisabeth Tonnard, he contado 21 títulos, es "Oceanus", un libro que nos hace sentir como tripulantes de un navío a la deriva y lo mejor de todo ello es la economía de medios de esta autora, en el libro tan sólo aparecen dos únicas fotografías que fueron encontradas de un archivo cedido a un museo, desconociéndose como en el libro anterior el nombre del fotógrafo. 

Elisabeth Tonnard. Oceanus
Elisabeth Tonnard. Oceanus
Elisabeth Tonnard. Oceanus

Elisabeth Tonnard, en Oceanus, combina recortes de dichas dos fotografías con fragmentos de una traducción del texto de "La Odisea" de Homero,  frases que se adaptan a las olas que forma un mar bravo. Podéis ver el libro completo en su versión online o haceros con una copia en papel pues aun quedan ejemplares disponibles, al contrario que el libro "Contemplation".


Podéis ver imágenes de todos sus libros aquí.


martes, 20 de diciembre de 2011

Los mejores fotolibros de 2011 según El Otro Blog

Como se ha puesto de moda el libro de fotografía y las listas de los mejores del año, no voy a ser menos y me uno a esa fiebre. Dicho sea antes que ha habido muchísimos buenos libros pero como siempre es bueno ponerse límites y obligarse a elegir, ahí va la apuesta. También es verdad que puede ser que al elegir durante los últimos meses del año se lleven el gato al agua libros que han salido hace muy poco al mercado y que por ello ahora mismo nos tiran más, lo cual también hará más meritorio elegir un libro publicado a principios de año.

Pero vayamos con la elección. Lo que he primado ha sido que el libro elegido tenga ese plus de objeto precioso que no tienen todos los libros, eso se suele apreciar cuando el contenido liga con el continente, cuando ámbos tiran en el mismo sentido, es algo muy evidente por lo que hemos de separar entre la historia o el documento que nos transmiten las imágenes del objeto en sí, quiero decir que una serie puede ser maravillosa pero hemos de separar ésta del libro como objeto, saberlo ver como un conjunto.

También valoro mucho que la huella del autor, el fotógrafo, quede evidente en la creación del libro, es algo también obvio, conociendo un poco al autor podemos intuirlo, el fotógrafo ha de involucrarse en el diseño del libro, es como si expusieramos sin cuidar como se verán nuestras fotos, es el soporte expositivo de nuestra serie. 

Por todo eso al final me quedo con estos tres libros. En primer lugar con "A living man declared dead and other chapters" de Taryn Simon.





De este libro me gusta sobretodo que le acompaña un áurea de seriedad que está en la línea de la metodología de trabajo de Taryn Simon. Se trata de un catálogo fruto de un estudio completo de situaciones de supervivencia que afectan a familias. Todo ello queda publicado en un solemne volumen enciclopédico. Por tanto, la serie de imágenes juega muy bien con el continente, formando un objeto creíble y muy atractivo por su perfecta factura.

El segundo elegido es muy diferente y muy parecido al primero. Se trata de "Paloma al aire" de Ricardo Cases. Muy diferente por el formato, "Paloma al aire" es una libreta de anillas, si el de Taryn Simon me recuerda a un volumen de Espasa Calpe, el de Ricardo Cases se acerca al famoso libro "Paris de nuit" de Paul Morand con fotografías de Brassaï.

© have a nice book

© have a nice book


© Dalpine
© Dalpine
He de confesar que cuando vi la portada de este libro sin ojear sus páginas pensé que era una locura utilizar una libreta de anillas, que las imágenes en dobles páginas no quedarían bien pero a la misma vez no me encajaba conociendo a Ricardo. Había visto antes páginas del libro que comentaba de Brassaï en el "Photobook: A History", pero ése no tiene imágenes a doble página y las anillas no atraviesan ninguna de ellas, sin embargo Ricardo lo hace y queda bien. En mi opinión eso se debe a que cada mitad de las imágenes a doble pueden jugar individidualmente, es como si partiera una imagen en dos, esta habilidad me recuerda el "Infinito" de David Jiménez, otro gran libro, aunque no de este año, en el que este recurso se utiliza constantemente durante todo el libro. En otras dobles, se dan unas simetrías que ayudan también a que funcionen.


Pero también me parece muy parecido al de Taryn Simon, en el sentido de que juega muy bien continente y contenido. En este caso la libreta nos puede sugerir donde los columbófilos escriben datos sosbre sus palomas, quien sabe, pero podría ser así, es un soporte muy común.

Este libro de Ricardo Cases bien merece una entrada aparte, tiene infinidad de detalles que hacen que el libro siga despertando interés en el lector tras sucesivas lecturas, por ejemplo la ventanita con forma de huevo que se abre en la portada del libro, las palomas son ovíparas y ese agujero tiene también forma de huevo, y el señor que asoma parece que tenga la cabeza llena de pájaros o el mismo podría haberse mimetizado en paloma y ser un pájaro más ... unas  páginas más adelante ese espacio en forma de huevo que fue recortado de la portada cobra vida en otra de las fotografías, creando un collage.


El tercero es un libro que hace pocos días descubrí gracias a mi amiga Natasha Christia, de la librería y galería Kowasa, en realidad se trata de una pareja de libros, obra de Jane Wilson and Jeremy Kunze. Los libros se titulan xxx y +++ y son toda una experiencia de postfotografía.

Mientras xxx recoge reproducciones de polaroids realizadas durante proyecciones de películas capturando besos, +++ recoge muertes. xxx tiene unas tapas rosas y +++ las tiene negras, ámbos libros se disfrutan en las manos y tienen un aire artesanal que los hacen muy atractivos, envueltos en fundas de plástico cosidas.

+++
+++
xxx
xxx
Esta ha sido mi selección e insisto en que otros muchos podrían estar en esta lista. Esta es también mi aportacion a la votación popular lanzada desde el Photobook Club Barcelona. Seguid sus resultados, seguro que descubrimos nuevos libros.

domingo, 27 de noviembre de 2011

Una edición de Il deserto rosso de Michelangelo Antonioni

De un tiempo para aquí y siguiendo los consejos de fotógrafos con los que realicé hace un tiempo cursos o talleres, como han sido Eduardo Momeñe o Ángel Albarrán, me he puesto a visionar cine de manera regular y centrándome en la obra de directores que se caracterizan por un uso más intenso de la fotografía, de todos los recursos que ofrece, que se fijan más en la narrativa de las imágenes que en seguir un esquema clásico de narración cinematografica hollywoodiense.

Filmografía de Michelangelo Antonioni
Entre estos directores se encuentra Michelangelo Antonioni, una vez has visto sus películas te das cuenta que lo menos importante es el desenlace sino el cómo se desarrolla la historia, entre sus temas se encuentran la incomunicación, las preocupaciones de la clase alta italiana de postguerra, temas que de por sí no tienen un desenlace claro, son historias demasiado genéricas... En este caso, Antonioni lo que intenta es crear una atmósfera que recree estos temas, los no lugares, la perfiferia, las zonas castigadas por la industria, los fenómenos atmosféricos, ... situaciones que hablan del género humano.

Ya en una entrada anterior hablaba de la niebla y la playa, el no lugar más aun en invierno, emparentando la imágenes de Antonioni con las de Luigi Ghirri, es obvio que ambos comparten elementos a la hora de crear una narrativa con sus imágenes. 

De esta comparación surgió un ejercicio en mi cabeza, ¿se podría crear una serie extrayendo fotogramas de una de sus películas y que éstos hablaran por sí mismos? Quizás no era necesario intentar ilustrar la película sino incluso encontrar deiferentes narrativas. Pues bien, he llevado a cabo el ejercicio y para ello he elegido "Il deserto rosso", su primera película en color y en la que como no el color juega un papel importantísimo que en todo momento representa el estado anímico de su protagonista.

Aquí tenéis una edición que he hecho de la película, cada uno puede hacer la suya, sería interesante ver otras ediciones. Es muy sencillo, mientras véis la película, con la ayuda de un reproductor de vídeo como es VLC se realizan capturas de los fotogramas que deseéis, una vez los tenéis los recortáis al tamaño que queráis con la ayuda de Adobe Bridge y por último creáis el libro con Booksmart de Blurb que más tarde podrá imprimirse en papel o descargarse en forma de iBook.


Mientras véis el libro os recomiendo escuchar la música de 24 artistas que se han inspirado en estas imágenes para crear sus composiciones en modo de homenaje a Antonioni. La podéis conseguir en el sello americano de música experimental and/OAR, el primero de ellos, es un doble cd y de descarga libre.



Y si queréis profundizar en el fenómeno Antonioni y su fotografía os recomiendo "Antonioni. Un compromiso ético y estético", un ensayo escrito por Ana Melendo y que podéis descargar aquí, aunque yo compré el libro publicado por la Filmoteca de Andalucía por tan sólo 10€.

Portada de "Antonioni. Un compromiso ético y estético" de Ana Melendo
También tenéis la posibilidad de ver la película a continuación.


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