Hace unas semanas escribía una entrada acerca de la exposición "Seducidos por el arte: pasado y presente de la fotografia" desde en un punto de vista inverso al que proponía la muestra. Ahora me gustaría añadir algunos aspectos interesantes que se pueden ver en dicha exposición. Como comentaba en su momento, el leit-motiv que defiende la muestra es la influencia que ha ejercido la pintura y la escultura sobre la fotografía, una disciplina más joven que las dos primeras en la función de representar la realidad. Esta influencia se puede ver a varios niveles, desde la elección de los mismos temas clásicos de la historia, la religión y la guerra hasta el uso de formatos que los equiparan en tamaño las fotografías a las pinturas commemorativas o a las miniaturas, según el caso, o por su aspecto (p.e.: pictorialismo), pasando por el uso de los clásicos géneros pictóricos; retrato, desnudo, paisaje y bodegón.
La exposición es muy extensa y plantea muchos temas adicionales al principal como son las influencias entre diferentes disciplinas artísticas, éstas no son compartimentos estanco, la reproductibilidad del arte y el aura de la obra única, el consumo de arte pictórico por el gran público, el efecto de la memoria en la percepción visual de las grandes obras pictóricas, el uso de belleza y violencia en el arte (precísamente las obras que abren y cierran la exposición tienen estas características) o el propio proceso creativo en fotografía.
Desarrollando el primer aspecto referido a la influencia entre diferentes disciplinas artísticas, la primera obra de la exposición ya nos introduce este concepto. La impresionante caja de luz "The destroyed room", obra de Jeff Wall es una reinterpretación de la obra "La muerte de Sardanápalo" de Eugène Delacroix, que a su vez se basa en un escrito homónimo de Lord Byron. Por otro lado, la fotografía de Wall inspiró el movimiento contracultural y fué utilizada por la banda Sonic Youth para uno de sus discos. Este es un buen ejemplo de las inluencias entre las diferentes disciplinas artísticas.
Dominó de influencias. Lord Byron, Eugène Delacroix, Jeff Wall, Sonic Youth |
Walter Benjamin ya nos habló de la desaparición del aura de la obra de arte debido a la reproductibilidad que nos dan las nuevas tecnologías, la fotografía lo permite cláramente. Muchos fotógrafos, para conseguir que sus obras fotográficas no pierdan ese aura que da mayor valor a la obra en el mercado, han optado por realizar copias únicas de su trabajo, sería el caso de artistas como Richard Learoyd que realiza positivos directos con camera obscura. Él mismo revela sus imágenes de gran tamaño, algunas a escala real, en su propio laboratorio, uno de los siete que hay en el mundo con capacidad para revelar ilfochrome de 50 pulgadas de ancho. Se dice que Jeff Wall tiene otro de esos exclusivos laboratorios.
Richard Learoyd. Man with Octopus Tattoo II, 2011. Obra única. 148.6 x 125.7 cm |
Os invito a ver una conferencia que dió hace dos años en el ICP de Nueva York, en ella explica su proceso creativo y nos muestra su técnica en detalle.
Exterior de la cámara obscura de Richard Learoyd. Fotograma extraido del vídeo de su conferencia en el ICP. |
Inerior de la cámara obscura de Richard Learoyd. Fotograma extraido del vídeo de su conferencia en el ICP. |
Laboratorio de Richard Learoyd. Fotograma extraido del vídeo de su conferencia en el ICP. |
La exposición también muestra obras que nos acercan a la dimensión física de la obra, de la que también habla Stephen Shore, y de cómo es nuestra aproximación a la obra de arte, de cómo las consumimos. Todo el mundo conoce la Gioconda pero ¿cuantos la han visto en vivo y en directo?, no es lo mismo ver una reproducción de una obra pictórica o un daguerrotipo en un libro a verlo en una sala expositiva, de ello nos habla la obra de Jorma Puranen que se puede ver en Caixaforum, una fotografía que deja al descubierto las diferentes capas de pintura que conforman la obra.
Jorma Puranen. Shadows, Reflections (after Goya). 2011 |
En Caixaforum se puede ver también una obra de José Manuel Ballester que ilustra la influencia de la memoria en la percepción de las obras. Ballester hace desaparecer el rastro humano de una serie de obras pictóricas famosas, de manera que al ver las imágenes manipuladas, intentamos recrearlas a partir del recuerdo que guardamos de la pintura original. El concepto de esta obra está en línea con las teorías de la percepción desarrolladas por Rudolf Arnheim sobre la percepción visual o de un más cercano Arnau Puig.
José Manuel Ballester. 3 de Mayo. 2008. Edición de 2 + 1 PA |
Un tema que introducía y que desarrollé en una entrada anterior es la combinación de belleza y violencia, algo que surge por la coincidencia de obras al inicio y al final de la exposición. Por una lado "The destroyed room" de Jeff Wall y por otro Ori Gersht y su "Big Bang", que consigue arrancar una pequeña sonrisa a quienes ven el vídeo.
Y para finalizar, el último tema sería el referente al proceso creativo en fotografía, algo que los fotógrafos sufrimos respecto a los pintores. Existe, entre el público general, una opinión de que la fotografía se resume en un clic y eso, claro está, anula cualquier posibilidad creativa. Por otro lado los fotógrafos tratamos de concienciar que el acto fotográfico no es un acto mecánico sino un acto intelectual y que en muchos casos la fotografía tiene un proceso de creación en el que el autor "construye" la obra, asimilándose la fotografía a un sistema aditivo de representación como es la pintura. Sería el caso de autores como Beate Gutschow o Jeff Wall, ya desarrollé este aspecto en una entrada anterior.
En la exposición, Maisie Broadhead muestra un audiovisual utilizando la técnica del time-lapse para mostrarnos el proceso creativo para llegar a una obra de los fotógrafos Hill y Adamson, un buen ejemplo de todo lo que rodea a un clic.
Y para finalizar, el último tema sería el referente al proceso creativo en fotografía, algo que los fotógrafos sufrimos respecto a los pintores. Existe, entre el público general, una opinión de que la fotografía se resume en un clic y eso, claro está, anula cualquier posibilidad creativa. Por otro lado los fotógrafos tratamos de concienciar que el acto fotográfico no es un acto mecánico sino un acto intelectual y que en muchos casos la fotografía tiene un proceso de creación en el que el autor "construye" la obra, asimilándose la fotografía a un sistema aditivo de representación como es la pintura. Sería el caso de autores como Beate Gutschow o Jeff Wall, ya desarrollé este aspecto en una entrada anterior.
En la exposición, Maisie Broadhead muestra un audiovisual utilizando la técnica del time-lapse para mostrarnos el proceso creativo para llegar a una obra de los fotógrafos Hill y Adamson, un buen ejemplo de todo lo que rodea a un clic.
Resumiendo, una exposición que muestra obras de arte magníficas y que introduce muchos temas sobre la fotografía y su incursión en el circuito del arte, muy recomendable visitarla, tenéis hasta el 19 de mayo de 2013 en Barcelona, más adelante se podrá ver en Madrid.