Siempre me ha atraido el género del paisaje en la pintura y cuando empecé a utilizar una cámara fotográfica, consecuentemente, empecé a hacer en su mayor parte fotografía de paisaje. En mi opinión la representación del paisaje, aunque no aparezcan sujetos, habla del hombre, de como nos relacionamos con la naturaleza. Esa relación, en gran medida, nos define.
Tras repasar la historia de la representación del paisaje, es curioso comprobar como el género del paisaje ha tenido diferente evolución en la pintura respecto a la fotografía. Mientras en la pintura este género fue durante muchos años un género menor, sólamente superior al bodegón, incluso en algún momento malvisto pues no llevaba consigo ninguna reflexión y requería un menor intelecto, la aceptación de tal género como arte no llegó hasta el Trecento, la fotografía sin embargo y sobretodo en sus inicios, en un gran número de imágenes fotográficas el motivo principal era el paisaje, era uno de los pocos temas que se podían acometer con éxito dado la baja sensibilidad de los soportes utilizados, y la imposibilidad de congelar el movimiento, podemos recordar como ejemplo el daguerrotipo del
Boulevard du Temple que hizo
Daguerre en 1838.
De un tiempo aquí me he dedicado a observar detenidamente paisajes pictóricos y fotográficos e intentar buscar un denominador común entre ellos o dar con algunas tipologías en función de cual es la relación del hombre con el entorno natural. Tras leer algún libro y algunas otras publicaciones, finalmente he encontrado una caracterización que me ha convencido, precisamente en la sabia
wikipedia. Dicha caracterización clasifica el paisaje en tres tipologías en función de nuestra relación con la naturaleza.
El primer tipo es el de los llamados
paisajes sublimes, que aparecieron con el movimiento romántico durante el siglo XVIII. En ellos nos encontramos con imágenes de naturaleza en que de alguna manera se pone de manifiesto su superioridad respecto al hombre, que por su parte aparece frágil ante tal escenario.
Si en pintura podemos ver dichos paisajes en obras de
Caspar David Friedrich, en fotografía los podemos ver en la obra de autores como
Peter Bialobrzeski o
Ruben Brulat por citar algunos. En las imágenes de estos dos fotógrafos encontramos a un personaje solitario o un reducido grupo en proporción muy inferior al paisaje en el que se encuentran. Estos paisajes además suelen tener un punto de vista muy elevado si no incluso un picado y no creo que sea algo casual elegir este punto de vista, como si una deidad nos estuviera observando.
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Caspar David Friedrich. Monje cerca del mar. |
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Peter Bialobrzeski. Serie Heimat. |
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Ruben Brulat. Serie Primates. |
Otros pintores y fotógrafos siguen incidiendo en la idea de la naturaleza dominante pero renuncian a la presencia del hombre en ese escenario, es lo que se puede llamar
paisaje naturalista, estos autores enfrentan al hombre en la escena desde el punto de vista del espectador, es un punto de vista más subjetivo que el caso anterior. Suelen ser imágenes donde los protagonistas son fenómenos atmosféricos, por ejemplo tormentas, en los que no mantenemos firme el horizonte, en los que perdemos un poco la nitidez con que observamos la escena, son recursos para transmitirnos la sensación de que no controlamos la naturaleza. Para ilustrar este tipo de paisajes os muestro unas imágenes del pintor
William Turner y del fotógrafo
Tod Hiddo.
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William Turner. Tormenta de nieve. |
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Tod Hiddo. Serie Landscapes. |
Un segundo tipo de paisajismo pretende mostrar la naturaleza dominada, en la que el hombre ya no está en peligro ante la naturaleza salvaje, como en el caso anterior, sino que la ha conseguido domesticar. En estas imágenes la fotografía intenta representar en cierta manera la topografía teniendo en cuenta la presencia del hombre en el entorno. Son imágenes transparentes, como diría Stephen Shore, que permiten ser vistas deteniéndose en muchos detalles.
El pintor por excelencia en esta categoría de paisaje es el que se dice fue el primer paisajista "universal" de la historia,
Joachim Patinir. Podéis observar la gran cantidad de detalles que incorpora la imagen, una perfecta topografía.
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Joachim Patinir. Paisaje con San Jerónimo. |
Ejemplos de esta relación de igualdad entre el hombre y el paisaje y de su integración en el mismo pueden ser las imágenes de los fotógrafos
Xavier Ribas o
Alexander Gronsky. Estas son imágenes en las que podemos ver como los sujetos se integran perfectamente en el paisaje sea cual sea su estado, incluso en la periferia de las ciudades, un paisaje para nada sublime.
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Xavier Ribas. Serie Sundays. |
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Alexander Gronsky. Serie The Edge. |
Un tercer tipo de paisaje es aquel en el que vemos como la naturaleza ha sido colonizada por el hombre. No existe ningún asomo de amenaza de la naturaleza hacia el hombre, en todo caso podría ser al revés. En este caso respecto al paisaje sublime la diferencia es muy clara, ahora la naturaleza puede ser la que está en peligro.
Si en pintura podemos hablar de
Albrecht Altdorfer, en fotografía el autor que encaja perfectamente en esta categoría de paisajes es
Edward Burtynsky. Sus imágenes suelen girar en torno a la dominación de la naturaleza por el hombre.
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Albrecht Altdorfer. La batalla de Alejandro Magno. |
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Edward Burtynsky. Serie Oil. |
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Mitch Epstein. Serie American Power. |
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Nadav Kander. Serie |
A partir de otros criterios se podrían hacer otras tipologías de paisajes pero el criterio utilizado aquí me parece interesante por lo comentado al principio, porque este criterio habla de nuestra relación con la naturaleza, si ésta es de igual a igual o bien una de las partes está sometida. Por otra parte aclarar, aunque es obvio, que los autores elegidos aquí pueden tener imágenes a incluir en más de una categoría y que por supuesto existen muchos más autores que no han sido citados. Ahora, intentad vosotros mismos asignar una categoría a los que conocéis, a ver si funciona la categorización o si por el contrario deberíamos ampliarla. Espero comentarios...